Una historia sobre polvorones y metodologías ágiles (II)

Polvorones día 1

Hoy es el tercer día del proyecto y, gracias al enfoque ágil que adoptamos, ya tenemos algunos datos interesantes que compartir. La verdad es que no sospechábamos que nuestro intento por civilizar el asalto a una caja de polvorones fuera a resultar una metáfora tan exacta sobre la gestión de proyectos… uno nunca termina de sorprenderse.

La primera conclusión es que he resultado ser un pésimo estimador (rayos!). En base a mis prejuicios (elaborando el plan predictivo inicial), consideré que los mantecados de cacao no tenían el más mínimo interés (valor) para el equipo… y resulta que me los quitan de las manos, oiga! Igualmente hubiera apostado por que los de canela volarían, y sin embargo nos está costando un gran trabajo encajarlos. Suerte que nos decantamos por el enfoque ágil

Estado del proyecto

Tal y como se aprecia en el manteca-down, nuestra velocidad es de infarto… me temo que en el sentido literal de la palabra (Martín, que el Señor te conserve la vista…).

Tendencia manteca Down

En calidad de product owner (PO), estoy obligado a recomendar a nuestro cliente el envío de más cajas de polvorones, ya que sería una pena perder esta fuerza de trabajo. Estará mal que lo diga yo, pero da gusto vernos en acción.

Por otro lado, es también interesante observar en el radar cuales son las especialidades de mayor valor para equipo:

Radar

Creo que es momento de ponerse imaginativos para encajar los mantecados de coco, alfajores y polvorón tradicional. Ya tenemos algunas ideas:

– Ofrecer a nuestros clientes un 0,005% de descuento (en proyecto nuevo) por unidad ingerida

– Ingestión obligatoria de una unidad por cada bug detectado

– ¿Nadie tiene una tía a la que le hagan gracia estas especialidades, tan nuestras…?

Agradeceremos sugerencias al respecto.

Incidencias hasta la fecha

Definición de terminado, terminado

Es un aspecto que de puro obvio se nos suele pasar… y esta vez no ha sido una excepción. Al no definir qué entendemos por «polvorón ingerido», se nos han dado situaciones complicadas, tal y como ilustra la evidencia nº1:

Done, done... fail!

Suerte que el equipo de testers es casi tan grande como el de glotones!

Orcos a las puertas

Esta es una expresión con la que Ángel Medinilla describe a todo intento de sabotear la pila de sprint. Aquellos que estáis siguiendo el proyecto minuto a minuto a través de twitter (#NavidadAgil) pensaréis que nuestra oficina es una bacanal gastronómica contínua… ya no se cómo vamos a desmentirlo. Creo que la siguiente secuencia de imágenes ilustra el problema por si sola:

Polvorones día 1

Pila día 2

Pila Día 3

Cómo se puede apreciar, el equipo está teniendo que soportar una ligera sobrepresión de demanda… Aún con todo, y a fuerza de poner a funcionar los dos carrillos, estamos pudiendo con todo (sin merma de la calidad, por supuesto). Cuando los chicos del área de innovación nos han sugerido meter los polvorones entre lechefrita y lechefrita para mejorar la velocidad, los hemos enviado a resolver incidencias facilonas durante un mes… se que sólo hacen su trabajo, pero todo tiene un límite!

Gracias por el apoyo, os seguiremos informando!

¡No te pierdas la tercera parte!