Todos los que trabajamos en proyectos tecnológicos, luchamos porque lleguen a buen puerto y no desaparezcan en el «Triángulo de las Bermudas» por no ser capaces de atender satisfactoriamente a un tiempo a estas variables: Recursos/Coste/Funcionalidad. Así que en la mayor parte de las ocasiones optamos por responder de algún modo a dos de ellas. Pero… Tic-tac, tic-tac… nunca debemos demorar las fechas de entrega o solicitar prórroga al cliente si no queremos encontrarnos en una situación comprometida.
Pero, hacer las cosas «deprisa, corriendo y mal» nos puede endeudar técnicamente. Y tarde o temprano pagaremos las consecuencias, y con intereses. Así que cuánto antes liquidemos esa deuda mas posibilidades tendremos de tomar ventaja en un mercado tan cambiante y competitivo.
No seamos ingenuos. La implantación, la asimilación y puesta en práctica de Metodologías Ágiles por parte de todos los implicados, de sus ritos y ceremonias, cuesta un tiempo y supone un coste. Porque asumirlas no es complicado pero sí muy exigente, ya que supone tener el coraje de comprometernos a completar un largo recorrido sin desfallecer, y actuar para alcanzar metas a corto plazo, con el esfuerzo sostenido de «sprinters de fondo».
Las Metodologías Ágiles tampoco son esa «bala de plata» que termina con todos los problemas que implica el desarrollo y aniquila todos nuestros males. La incertidumbre en los procesos de desarrollo es inherente a nuestros proyectos, así que no podemos -ni debemos- ignorarla. Pero precisamente por eso debemos intentar reducir a la mínima expresión esas otras zonas grises que son fruto de la indefinición inicial de determinados requerimientos, de los malentendidos a lo largo del proceso, e incluso de la desconfianza respecto a la honestidad del desempeño de los equipos y personas.
La implantación de estas metodologías facilita la transparencia y favorece el respeto entre los miembros de los equipos porque permite valorar objetivamente el compromiso de ofrecer resultados de quienes se esfuerzan en alcanzar las metas fijadas al fin de cada iteración.
Así que, llegados a este punto… ¿Cómo creemos que puede contribuir la implantación de las Metodologías Ágiles a los proyectos de desarrollo de «sitios inteligentes«?
Porque no son sólo metodologías y prácticas que fijan objetivos y metas caracterizadas por el acrónimo SMART propio de la gestión de proyectos, sino que para los equipos de trabajo y los objetivos de nuestro negocio también resultan:
Seductoras
- Porque presentan los entornos y las demandas de la producción a una escala más humana.
- Porque atienden a las necesidades para poder alcanzar las metas y concluir las tareas.
- Por lo que tienen de reto, al ser la puesta en escena ideal para mostrar entusiasmo, fomentar la confianza en las propias capacidades y observarlas en el equipo de trabajo.
Métodicas
- Porque los datos objetivos son fundamentales para detectar errores e inconvenientes, medir su impacto y buscar soluciones para que los proyectos crezcan y evolucionen a un ritmo adecuado.
- Las reuniones ágiles, mas o menos breves pero frecuentes (ya sean de planeamiento, control diario, demos, retrospectivas o prospectivas) permiten a todos los interesados (desde el cliente hasta el desarrollador), contribuír de algun modo y construir conjuntamente la hoja de ruta del proyecto, medir su alcance de forma realista y mostrar su evolución de forma muy gráfica, casi a tiempo real.
- Porque la disciplina autoimpuesta y la administración del tiempo con mesura permite concentrarse en las tareas, enfocarlas con precisión, y emplear todo el esfuerzo y las habilidades de cada integrante del equipo en cumplir con su compromiso sin distracciones.
Accesibles
- Porque los objetivos, las formas, métodos, normas y reglas definidas por el Agilismo para ser mas productivos y eficaces son simples, claras y tienen mucho de «sentido común».
- Las diferentes fases del desarrollo y del proyecto que hay que acometer son facilmente comprensibles y deben quedar claras al inicio del proyecto para todos los implicados.
- Y al mismo tiempo nos evitan procesos burocráticos densos y la elaboración de documentación extensa y farragosa. Y nos permiten «retratarnos» y tomar instantáneas del progreso del proyecto contínuamente en un mapa de ruta flexible y trasparente.
Relacionales
- Porque para los Agilistas, las personas y sus interacciónes importan más que los procesos y las herramientas.
- Porque la implantación de estas metodologías favorece el intercambio de ideas, busca la cohesión y fomenta la empatía, promoviendo el diálogo, ya que tenemos que ser proactivos necesariamente, acostumbrarnos a escuchar, conversar y entablar relaciones con los integrantes del resto del equipo, sean cuales sean sus virtudes y sus diferencias.
Tangibles
- Porque proporcionan resultados a corto plazo. Y permiten reaccionar a tiempo, aprovechando la (re)definición de los requerimientos, las retrospectivas y el conocimiento colectivo en beneficio del producto final, admitiendo mejoras mientras se avanza.
- Y sin duda, responden al patrón de Investigación+ Desarrollo+innovación que augura progreso, eficacia y rentabilidad.
Maite dice:
Gracias por tu artículo
Si os interesa el tema de metodologías ágiles
http://www.smartsite.es/el-oficio-y-el-negocio/de-proyectos-metodologias-agiles-y-s-m-a-r-t-sites-317.htm
Maite dice:
No sé porque en el post que escribí el viernes el enlace no es el correcto, lo vuelvo a escribir:
http://www.cein.es/pdf_documentacion/metodologiasagilesprograma.pdf