Apps vs navegadores en smartphones y tabletas. ¿Cuándo hay que optar por un app? (II)

Viene de Apps vs navegadores en smartphones y tabletas. ¿Cuándo hay que optar por un app? (I)

Al principio del verano escribía acerca de lo importante que es desarrollar una experiencia única a la hora de lanzarse al mundo de las apps y cómo sin un planteamiento de este tipo resultaría difícil justificar la apuesta, sobre todo teniendo en cuenta el protagonismo de la web en el mundo de los servicios online.

Desde entonces no han pasado demasiadas cosas, normal en los meses de verano. O quizás sí.

De nuevo desde Wired, Chris Anderson y Michael Wolff,  remueve los cimientos de Internet hablando de la muerte de la web y augurando un gran futuro a la Internet basada en aplicaciones y servicios de nicho por los que el usuario tendrá que pagar. Si todavía no lo has leído lo puedes encontrar en: http://www.wired.com/magazine/2010/08/ff_webrip/all/1

¿Pero uno de ellos no es el tipo que había escrito un libro que se titulaba Free hace muy pocos años? Cómo cambian las cosas, o al menos las ideas… y a qué velocidad.

De pronto, la temática de estos posts se convierte en un tema de absoluto interés y actualidad. Aunque os aseguro que ya lo era antes. Sólo viendo datos acerca de la venta de smartphones y del volumen de descarga de aplicaciones que se está dando en el último año nos podemos hacer una idea de los grandes cambios que se avecinan.

O incluso mirando el escritorio de nuestros ordenadores, cada vez más lleno de iconos de nuevos jugadores online como Skype, Twitter, Dropbox…

Ahora bien, ¿realmente tiene sentido lanzarse a crear aplicaciones nativas para smartphones y tablets sabiendo que con el navegador podemos llegar a tanta gente?

La respuesta es sí, sobre todo si con ello pretendemos alterar el modelo de negocio tradicional de la web.

Y, ¿cuál puede ser el cambio fundamental en este sentido?

Cobrar por nuestros servicios, o al menos por algunos de ellos, sobre todo cuando hablamos del negocio de contenidos y de las empresas de medios.

¿Por qué este nuevo marco puede ser el adecuado?

Para empezar es un entorno pensado para comprar y vender. El mundo de los smartphones y tabletas, de la mano de Apple, plantea desde el origen un escenario con pretensiones muy claras, un mercado donde miles de compañías ofrecen sus aplicaciones y millones de usuarios seleccionan y descargan aquellas más atractivas.

Las reglas y los procesos para ambas partes son claros y facilitan las leyes tradicionales de la oferta y la demanda.

De hecho, distan bastante de la web, donde todavía muchas empresas e instituciones se pierden a la hora de acertar con sus apuestas. Les resulta un mundo hostil y difícil de entender, a pesar del transcurso de los años.

 

¿Cuáles son esas reglas claras?

Estar presente en cuatro o cinco entornos muy concretos (Itunes, Android, Blackberry…) pone al alcance un mercado global de usuarios consumidores.

La presencia en estos mercados tiene barreras menores, ya que su coste es bajo, la intermediación está claramente definida e ingresa en función de las ventas que se hagan.

Resulta sencillo definir diferentes estrategias comerciales, aunque también es cierto que hoy en día al menos Apple plantea serias limitaciones, sobre todo para el sector de los medios de comunicación, para los cuales en el futuro será clave plantear una estrategia comercial integrada entre sus distintos canales de distribución.

Aunque todavía es un entorno nuevo, con el tiempo se verá que es más sencillo y barato desarrollar apps que plataformas web que tienen que atender infinidad de versiones de navegador, ordenadores personales, resoluciones de pantalla, conectividad, etc.

¿Y las ventajas para los usuarios o consumidores?

La intermediación clara da solidez a la oferta y mejora aspectos como la confianza y seguridad a la hora de realizar compras.

La simplicidad en los procesos y la filosofía de los productos ofertados, sencillos, de nicho y baratos, facilita la compra por impulso, la descarga y el uso inmediato, algo que con el tiempo va llegando a la web pero que todavía tiene muchos retos por delante.

Pero también hay importantes retos por el camino

En este entorno globalizado, o eres el que mejor lo haces, o tendrás problemas de sostenibilidad. La competencia es implacable, y cada nicho en muchos casos no tiene espacio más que para un puñado de jugadores.

La creatividad es esencial y eso pone en serio riesgo a aquellas industrias que en los últimos años no han destacado precisamente por ella. ¿Se te ocurre alguna en concreto?

Los nuevos dispositivos requieren experimentar y dar pasos en falso, algo difícil de justificar en estos tiempos de crisis.

La calidad percibida debe ser muy grande, porque para el usuario buscar alternativas y cambiar será muy sencillo.

El reto es que no valen los atajos. Lavarle la cara a lo que tradicionalmente hemos ofrecido gratuitamente en la web y esperar a que la “fiebre” del IPhone y algunas de sus atractivas apps nos genere ventas importantes parece una estrategia débil. Probablemente la mayor parte de los usuarios no estén por la labor de pagar por ello.